Medicamentos pueden afectar la salud bucal

Muchas veces sentimos molestias en la boca sin saber por qué. Sequedad, mal aliento y dolor en las encías son algunos síntomas bastante frecuentes, que suelen aparecer por causas distintas. Uno de los factores que puede desencadenar esas y otras molestias es la ingesta de medicamentos.
En la mayoría de los casos, se trata de efectos secundarios de poca gravedad, que causan molestias bucales en el día a día pero que no suponen un riesgo mayor para la salud. Muchos desaparecen después de que se encierra el medicamento, sin dejar secuelas. Sin embargo, si al ingerir algún fármaco se experimenta molestias en la boca, la recomendación es consultar el odontólogo.

 

Síntomas comunes

El síntoma más común causado por la ingesta de fármacos es la sequedad bucal. Ya se sabe que existen más de 400 medicamentos que pueden disminuir el flujo de saliva, lo que conlleva a enfermedades bucales, como la gingivitis, caries y periodontitis. Los medicamentos más habituales que pueden producir sequedad bucal son antihistamínicos, analgésicos, diuréticos, antidepresivos, antihipertensivos, etc., todos ellos fármacos de habitual prescripción.

Aparición de caries

Otro efecto secundario que pueden producir los medicamentos es la aparición de caries. Algunos fármacos alteran la composición de la placa dental y del PH de la boca, lo que deja a uno más susceptible a padecer este mal. El azúcar presente en algunos fármacos líquidos también ayuda al desarrollo de esa enfermedad. En estos casos, lo que se recomienda es que se enjuague la boca con agua inmediatamente de tomar el medicamento.

Anticoagulantes

Los anticoagulantes pueden provocar el sangrado de las encías, pues hacen que la sangre tarde más tiempo en coagular. Si toma este tipo de medicamento y sufre con el sangrado en la boca, haga una visita al dentista.

Sentido del gusto

Algunos medicamentos también pueden alterar el sentido del gusto, dejando un sabor metálico o amargo en la boca. Entre estos fármacos se encuentran antibióticos, parches de nicotina, algunos inhaladores respiratorios, los utilizados para la regulación de la presión arterial etc. Las personas que usan inhaladores deben tener un cuidado especial, pues aquellos que contienen esteroides pueden causar erosión del esmalte de los dientes.

Ya que estos son efectos secundarios y sin gravedad, no debes dejar de tomar los medicamentos al detectar los síntomas en la boca. Lo indicado en estos casos es consultar un especialista.
Accede al resto de los temas para saber más
Share:

PERIODONTITIS

La periodontitis, denominada comúnmente piorrea, es una enfermedad crónica e irreversible que puede cursar con una gingivitis inicial, para luego proseguir con una retracción gingival y pérdida de hueso hasta, en el caso de no ser tratada, dejar sin soporte óseo al diente. La pérdida de dicho soporte implica la pérdida irreparable del diente mismo. De etiología bacteriana que afecta al periodonto,se da mayormente en adultos de la tercera edad; el tejido de sostén de los dientes, constituido por la encía, el hueso alveolar, el cemento radicular y el ligamento periodontal. Diagnóstico Tiene efectos como caries, mal aliento, dolor al masticar y sangrados abundantes y no se contagia por dar un beso, por beber del mismo vaso o por medio de la saliva. Al principio puede manifestarse por una ligera inflamación gingival, con sangrado discreto de las encías al cepillarse los dientes y un cierto grado de tumefacción y enrojecimiento de las encías. Su diagnóstico precoz contribuye a un mejor pronóstico ya que es condición necesaria para frenar su evolución cuanto antes. Signo principal es la formación de una bolsa periodontal por pérdida de inserción, y la forma de medir es por medio de la sonda periodontal. Este procedimiento de periodotología se llama sondaje periodontal y con él los dentistas obtienen la profundidad de sondaje que sirve para medir la afectación que la enfermedad periodontal y la destrucción de hueso que esta ha provocado. Los valores obtenidos con el sondaje de diagnostico periodontal servirán de referencia en los mantenimientos periodontales que se deberán realizar cada 6 meses por el periodoncista.Fumar es uno de los factores de riesgo más significativos relacionados con el desarrollo de la periodontitis. Por otra parte el hábito de fumar o usar productos de tabaco puede disminuir el efecto de algunos tratamientos, además de enmascarar la enfermedad ya que disminuye el sangrado. Además de la placa bacteriana, existen otros factores locales y sistémicos que modifican la respuesta del huésped ante la invasión bacteriana, facilitando o por el contrario retardando el proceso infeccioso, por ejemplo tabaquismo, diabetes mellitus, déficits de neutrófilos (Síndrome de Down, de Papillon-Lefèvre o de Marfan), etc. Sin embargo, es de vital importancia comprender que la única forma de evitar su aparición es manteniendo una adecuada higiene oral y visitas periódicas al odontólogo. La enfermedad en su forma agresiva (periodontitis agresiva) puede aparecer en edades tempranas, evolucionando de manera rápida, lo que provoca la pérdida de piezas dentales en personas jóvenes. Periodontitis simple Es la forma más prevalente. Se hace clínicamente significativa sobre los treinta años de edad y suele estar precedida de una gingivitis. La pérdida de soporte se produce en los periodos activos de la enfermedad. Sin embargo, la presencia de Porphyromonas gingivalis indica una alta probabilidad de periodontitis activa. Periodontitis agravada por factores sistémicos Enfermedades como la diabetes mellitus, la enfermedad de Addison, la enfermedad de Crohn, enfermedades hematológicas o el sida provocan una progresión más rápida de la periodontitis, con diferentes manifestaciones clínicas. Periodontitis agresiva (de inicio precoz) Aparece a los veinte años de edad o antes. Supone, aproximadamente, entre un 10 y un 15% de todas las periodontitis. Periodontitis agresiva localizada Afecta principalmente a los primeros molares e incisivos, probablemente porque ya están erupcionados al iniciarse la enfermedad. Puede progresar a la forma generalizada o, posteriormente, a la periodontitis de evolución rápida. Tanto la forma localizada como la generalizada tienen la misma etiología, pero su presentación depende de la efectividad de la respuesta defensiva del huésped. Existen una serie de factores asociados que son: el déficit en la quimiotaxis de los leucocitos, el número reducido de quimiorreceptores superficiales y la cantidad anormal de glicoproteínas en la superficie de los neutrófilos. Periodontitis de inicio precoz generalizada Puede generarse desde una forma localizada o debutar así. Se distingue de la periodontitis de evolución rápida en función del tiempo de inicio de la enfermedad. Sin embargo, la edad no puede precisarse, pues el tiempo del diagnóstico no coincide con el inicio de la enfermedad. Se relaciona con la presencia de una serie de bacterias como son Actynomices actinomycetem comitans o la Porfiromona gingivalis. Periodontitis de inicio precoz relacionada con enfermedades sistémicas Periodontitis de inicio precoz relacionada con enfermedades sistémicas Consecuencias colaterales Se ha observado que las bacterias presentes en este tipo de infecciones migran desde la boca hasta la circulación sanguínea, lo que produce un daño directo en el endotelio (componente principal de la pared arterial) con la consecuente formación de ateromas (engrosamiento de la pared arterial debido al depósito de colesterol) y trombos. Incluso, en pacientes fallecidos, se han realizado biopsias de ateromas, y se han encontrado bacterias periodontales, patógenos propios de las encías.