Dar biberón antes de dormir puede provocar 'caries del biberón'

Dar el biberón a los niños para dormir es un pésimo hábito bucal pues puede provocar la aparición de la llamada 'caries del biberón' que resulta especialmente agresiva y puede afectar a niños muy pequeños, según explicó la odontóloga de Clínicas Vital Dent Olga Prieto.


Con el fin de prevenir estas caries, Prieto recomendó que si se deja al niño dormido con el biberón, después "se le limpie con una gasa y agua o bien darle un biberón con agua para lograr una mínima limpieza".

Cuando se da el caso, el tratamiento para los niños es igual que una caries de un diente definitivo, por tanto "se les debe empastar cuanto antes porque el diente se puede infectar gravemente", explicó. Hay que tener en cuenta que "los dientes de leche son más frágiles que los definitivos, además de que los niños sufren los dolores más intensamente y llevan peor las visitas al dentista", afirmó la experta.

En este sentido, aconsejó a los padres, que "acostumbren a los niños a tener la boca limpia desde pequeños". A los bebés sin dientes "hay que limpiarles con gasas con agua y cuando empiezan a salir los dientes, cepillarlos con pasta de dientes sin flúor hasta que sepan escupir", explicó. Cuando el niño aprenda a escupir "se podrá usar una pasta específica para niños y será el momento de enseñarles la importancia del hábito del hilo dental".

Hasta que el niño tiene año y medio, el hábito de la succión es natural y no produce ningún problema, "por lo que se puede usar el chupete sin preocupaciones", señaló Prieto. Pero a partir de esta edad, esta costumbre "puede provocar un cambio en la posición de los dientes y darse malas posiciones dentales, como la de mordida abierta", explicó. Esta mala postura puede ser la causante de un aumento de infecciones y caries.

Si el hábito del chupete continua a partir de los 4 años, "se podrían llegar a dar deformaciones en la estructura ósea, lo que conlleva complicaciones más intensas, ya que a la hora de erupcionar los dientes definitivos podría afectar a la estructura bucal", aseguró.

Así, la odontóloga explicó que hay que eliminar a los niños "los hábitos que empujan al diente cuando sale, pues esto es lo que va a cambiar la posición del diente definitivo". Igualmente, mientras crecen los dientes definitivos es "importante mantener los hábitos de limpieza normales".

Igualmente, recordó que la alimentación equilibrada es importante también para los dientes y recalcó que las chucherías "son mucho más perjudiciales para los dientes de leche" por la fragilidad de estos.
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1 comentarios:

Blemil plus forte dijo...

Hay que ir con cuidado con la leche y los dientes de los bebés. Quedarse con comida en la boca durante la noche no es bueno ni para pequeños ni mayores. Yo siempre sigo los consejos de Ordesa, son expertos en alimentación infantil así que visitar su web puede ser de gran ayuda para muchas mamis!

Un saludo,
Lidia

PERIODONTITIS

La periodontitis, denominada comúnmente piorrea, es una enfermedad crónica e irreversible que puede cursar con una gingivitis inicial, para luego proseguir con una retracción gingival y pérdida de hueso hasta, en el caso de no ser tratada, dejar sin soporte óseo al diente. La pérdida de dicho soporte implica la pérdida irreparable del diente mismo. De etiología bacteriana que afecta al periodonto,se da mayormente en adultos de la tercera edad; el tejido de sostén de los dientes, constituido por la encía, el hueso alveolar, el cemento radicular y el ligamento periodontal. Diagnóstico Tiene efectos como caries, mal aliento, dolor al masticar y sangrados abundantes y no se contagia por dar un beso, por beber del mismo vaso o por medio de la saliva. Al principio puede manifestarse por una ligera inflamación gingival, con sangrado discreto de las encías al cepillarse los dientes y un cierto grado de tumefacción y enrojecimiento de las encías. Su diagnóstico precoz contribuye a un mejor pronóstico ya que es condición necesaria para frenar su evolución cuanto antes. Signo principal es la formación de una bolsa periodontal por pérdida de inserción, y la forma de medir es por medio de la sonda periodontal. Este procedimiento de periodotología se llama sondaje periodontal y con él los dentistas obtienen la profundidad de sondaje que sirve para medir la afectación que la enfermedad periodontal y la destrucción de hueso que esta ha provocado. Los valores obtenidos con el sondaje de diagnostico periodontal servirán de referencia en los mantenimientos periodontales que se deberán realizar cada 6 meses por el periodoncista.Fumar es uno de los factores de riesgo más significativos relacionados con el desarrollo de la periodontitis. Por otra parte el hábito de fumar o usar productos de tabaco puede disminuir el efecto de algunos tratamientos, además de enmascarar la enfermedad ya que disminuye el sangrado. Además de la placa bacteriana, existen otros factores locales y sistémicos que modifican la respuesta del huésped ante la invasión bacteriana, facilitando o por el contrario retardando el proceso infeccioso, por ejemplo tabaquismo, diabetes mellitus, déficits de neutrófilos (Síndrome de Down, de Papillon-Lefèvre o de Marfan), etc. Sin embargo, es de vital importancia comprender que la única forma de evitar su aparición es manteniendo una adecuada higiene oral y visitas periódicas al odontólogo. La enfermedad en su forma agresiva (periodontitis agresiva) puede aparecer en edades tempranas, evolucionando de manera rápida, lo que provoca la pérdida de piezas dentales en personas jóvenes. Periodontitis simple Es la forma más prevalente. Se hace clínicamente significativa sobre los treinta años de edad y suele estar precedida de una gingivitis. La pérdida de soporte se produce en los periodos activos de la enfermedad. Sin embargo, la presencia de Porphyromonas gingivalis indica una alta probabilidad de periodontitis activa. Periodontitis agravada por factores sistémicos Enfermedades como la diabetes mellitus, la enfermedad de Addison, la enfermedad de Crohn, enfermedades hematológicas o el sida provocan una progresión más rápida de la periodontitis, con diferentes manifestaciones clínicas. Periodontitis agresiva (de inicio precoz) Aparece a los veinte años de edad o antes. Supone, aproximadamente, entre un 10 y un 15% de todas las periodontitis. Periodontitis agresiva localizada Afecta principalmente a los primeros molares e incisivos, probablemente porque ya están erupcionados al iniciarse la enfermedad. Puede progresar a la forma generalizada o, posteriormente, a la periodontitis de evolución rápida. Tanto la forma localizada como la generalizada tienen la misma etiología, pero su presentación depende de la efectividad de la respuesta defensiva del huésped. Existen una serie de factores asociados que son: el déficit en la quimiotaxis de los leucocitos, el número reducido de quimiorreceptores superficiales y la cantidad anormal de glicoproteínas en la superficie de los neutrófilos. Periodontitis de inicio precoz generalizada Puede generarse desde una forma localizada o debutar así. Se distingue de la periodontitis de evolución rápida en función del tiempo de inicio de la enfermedad. Sin embargo, la edad no puede precisarse, pues el tiempo del diagnóstico no coincide con el inicio de la enfermedad. Se relaciona con la presencia de una serie de bacterias como son Actynomices actinomycetem comitans o la Porfiromona gingivalis. Periodontitis de inicio precoz relacionada con enfermedades sistémicas Periodontitis de inicio precoz relacionada con enfermedades sistémicas Consecuencias colaterales Se ha observado que las bacterias presentes en este tipo de infecciones migran desde la boca hasta la circulación sanguínea, lo que produce un daño directo en el endotelio (componente principal de la pared arterial) con la consecuente formación de ateromas (engrosamiento de la pared arterial debido al depósito de colesterol) y trombos. Incluso, en pacientes fallecidos, se han realizado biopsias de ateromas, y se han encontrado bacterias periodontales, patógenos propios de las encías.