Los 10 vicios que dañan tus dientes

El tabaco, el café o morderte las uñas son algunas de las costumbres que tienes que aprender a dejar si quieres lucir una sonrisa limpia y blanca durante mucho tiempo.
Es cierto que asociamos los malos hábitos dentales con la niñez. Pero las malas costumbres relacionadas con la boca a veces continúan e incluso aparecen con los años y esto puede dañar tu sonrisa. Aprende a controlar los malos hábitos que producen que tu dentadura no brille en todo momento. Una buena higiene bucal es uno de los factores clave para lucir unos dientes sanos todos los días de tu vida. El vino o el azúcar son enemigos naturales de los dientes, contrólalos.

Es el doctor Iván Malagón el que te propone un decálogo que puede salvar tus dientes:

 

1. Fumar

La nicotina oscurece el esmalte y mancha los dientes. Puede provocar además enfermedades en las encías, que a su vez aflojan las piezas dentales.

2. Tomar café

Es una costumbre que favorece la aparición de manchas en los dientes.

3. Beber vino

Con el vino, sobre todo si es tinto, tendremos el mismo problema pero, además, puede provocar el desgaste de la superficie de los dientes.

4. Rechinar los dientes o apretarlos en exceso (bruxismo)

Esta costumbre desgasta la superficie de los dientes y hasta puede aflojarlos. También afecta a la articulación de la mandíbula. A veces es una costumbre que comienza en la infancia y en casos graves es necesario dormir con un protector especial.

5. Consumir alimentos con azúcar

No solo los caramelos y los dulces están llenos de azúcar. También los refrescos tienen una buena cantidad, sin contar los ácidos que poseen, y que afectan el esmalte de los dientes. Ojo con los “alimentos sin azúcar”, que son igualmente dañinos en exceso.

6. Morderse las uñas

Es peligroso sobre todo porque provoca microtraumatismos en los dientes (pequeñas roturas) y afecta mucho a la articulación de la mandíbula. Tampoco es muy recomendable morder hielo o lápices, ya que se pueden causar en los dientes daños irreparables. ¡Pónle remedio a este mal hábito!

7. Usar los dientes como herramienta

Esta costumbre puede llevar a los dientes a desgastarse e incluso a fracturarse.

8. Mala higiene

El cepillado debes realizarlo tres veces al día y de forma vertical y circular con un cepillo de cerdas suaves. Se recomienda usar pasta que tenga flúor, hilo dental y enjuague bucal para obtener una calificación de limpieza bucal de 10.

9. Perforaciones y piercings

Son muy peligrosos para dientes, encías y lengua. El metal del pendiente puede provocar infecciones, enfermedades en las encías y hasta pérdida de los dientes.

10. Comer patatas fritas de paquete

El almidón que contienen se convierte en ácido, y este ácido puede atacar los dientes hasta por 20 minutos.

Ya lo sabes, si quieres presumir de una sonrisa perfecta, estos son los hábitos que debes evitar.

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PERIODONTITIS

La periodontitis, denominada comúnmente piorrea, es una enfermedad crónica e irreversible que puede cursar con una gingivitis inicial, para luego proseguir con una retracción gingival y pérdida de hueso hasta, en el caso de no ser tratada, dejar sin soporte óseo al diente. La pérdida de dicho soporte implica la pérdida irreparable del diente mismo. De etiología bacteriana que afecta al periodonto,se da mayormente en adultos de la tercera edad; el tejido de sostén de los dientes, constituido por la encía, el hueso alveolar, el cemento radicular y el ligamento periodontal. Diagnóstico Tiene efectos como caries, mal aliento, dolor al masticar y sangrados abundantes y no se contagia por dar un beso, por beber del mismo vaso o por medio de la saliva. Al principio puede manifestarse por una ligera inflamación gingival, con sangrado discreto de las encías al cepillarse los dientes y un cierto grado de tumefacción y enrojecimiento de las encías. Su diagnóstico precoz contribuye a un mejor pronóstico ya que es condición necesaria para frenar su evolución cuanto antes. Signo principal es la formación de una bolsa periodontal por pérdida de inserción, y la forma de medir es por medio de la sonda periodontal. Este procedimiento de periodotología se llama sondaje periodontal y con él los dentistas obtienen la profundidad de sondaje que sirve para medir la afectación que la enfermedad periodontal y la destrucción de hueso que esta ha provocado. Los valores obtenidos con el sondaje de diagnostico periodontal servirán de referencia en los mantenimientos periodontales que se deberán realizar cada 6 meses por el periodoncista.Fumar es uno de los factores de riesgo más significativos relacionados con el desarrollo de la periodontitis. Por otra parte el hábito de fumar o usar productos de tabaco puede disminuir el efecto de algunos tratamientos, además de enmascarar la enfermedad ya que disminuye el sangrado. Además de la placa bacteriana, existen otros factores locales y sistémicos que modifican la respuesta del huésped ante la invasión bacteriana, facilitando o por el contrario retardando el proceso infeccioso, por ejemplo tabaquismo, diabetes mellitus, déficits de neutrófilos (Síndrome de Down, de Papillon-Lefèvre o de Marfan), etc. Sin embargo, es de vital importancia comprender que la única forma de evitar su aparición es manteniendo una adecuada higiene oral y visitas periódicas al odontólogo. La enfermedad en su forma agresiva (periodontitis agresiva) puede aparecer en edades tempranas, evolucionando de manera rápida, lo que provoca la pérdida de piezas dentales en personas jóvenes. Periodontitis simple Es la forma más prevalente. Se hace clínicamente significativa sobre los treinta años de edad y suele estar precedida de una gingivitis. La pérdida de soporte se produce en los periodos activos de la enfermedad. Sin embargo, la presencia de Porphyromonas gingivalis indica una alta probabilidad de periodontitis activa. Periodontitis agravada por factores sistémicos Enfermedades como la diabetes mellitus, la enfermedad de Addison, la enfermedad de Crohn, enfermedades hematológicas o el sida provocan una progresión más rápida de la periodontitis, con diferentes manifestaciones clínicas. Periodontitis agresiva (de inicio precoz) Aparece a los veinte años de edad o antes. Supone, aproximadamente, entre un 10 y un 15% de todas las periodontitis. Periodontitis agresiva localizada Afecta principalmente a los primeros molares e incisivos, probablemente porque ya están erupcionados al iniciarse la enfermedad. Puede progresar a la forma generalizada o, posteriormente, a la periodontitis de evolución rápida. Tanto la forma localizada como la generalizada tienen la misma etiología, pero su presentación depende de la efectividad de la respuesta defensiva del huésped. Existen una serie de factores asociados que son: el déficit en la quimiotaxis de los leucocitos, el número reducido de quimiorreceptores superficiales y la cantidad anormal de glicoproteínas en la superficie de los neutrófilos. Periodontitis de inicio precoz generalizada Puede generarse desde una forma localizada o debutar así. Se distingue de la periodontitis de evolución rápida en función del tiempo de inicio de la enfermedad. Sin embargo, la edad no puede precisarse, pues el tiempo del diagnóstico no coincide con el inicio de la enfermedad. Se relaciona con la presencia de una serie de bacterias como son Actynomices actinomycetem comitans o la Porfiromona gingivalis. Periodontitis de inicio precoz relacionada con enfermedades sistémicas Periodontitis de inicio precoz relacionada con enfermedades sistémicas Consecuencias colaterales Se ha observado que las bacterias presentes en este tipo de infecciones migran desde la boca hasta la circulación sanguínea, lo que produce un daño directo en el endotelio (componente principal de la pared arterial) con la consecuente formación de ateromas (engrosamiento de la pared arterial debido al depósito de colesterol) y trombos. Incluso, en pacientes fallecidos, se han realizado biopsias de ateromas, y se han encontrado bacterias periodontales, patógenos propios de las encías.