DIENTES SANOS, DIENTES BELLOS
Cada día se forma una delgada capa de bacterias sobre tus dientes. Con el paso del tiempo, estas bacterias pueden dañar la cubierta exterior o esmalte, y formar caries. Por lo general, cuando llegan las caries también llegan las molestias y el dolor, además de que no podrás comer bien y quizá temas hablar o sonreír en público. Por ello, cada día debes tener algunos cuidados básicos. En caso de que alguna caries ya se haya formado, el dentista es el indicado para tratarla.
LIMPIEZA A FONDO
• Tómate el tiempo necesario para cepillar tus dientes con cuidado. Hazlo después de cada comida.
• Cuando te laves los dientes, también debes cepillar tu lengua para ayudar a mantener tu boca limpia.
• Utiliza hilo dental, por lo menos una vez al día, para remover los restos de comida que el cepillado no puede sacar.
• Usa enjuague bucal al final del procedimiento, para que proteja tus dientes y tengas buen aliento.
ADEMÁS…
• Visita a tu dentista cada seis meses para que te revise y te haga una limpieza.
• Lleva una dieta balanceada y no abuses del azúcar, los dulces y los refrescos.
• No fumes. Fumar incrementa el riesgo de enfermedades de las encías y además hace que tus dientes se vuelvan amarillentos (¡fuchi!).
• Utiliza crema humectante para labios con factor de protección solar para mantener tus labios bien hidratados y protegidos.
• No te olvides de aplicarte siempre brillo labial. Dientes blancos más labios rojos harán tu sonrisa más impactante.
0 comentarios:
Publicar un comentario