Es importante detectar a tiempo la dolencia para evitar desgaste dental o pérdida de piezas. Algunos de los síntomas son rigidez dental, desgaste o dolores de cabeza.
[Img #26688]
Imagen de una paciente a la que se le está haciendo una prueba para conocer su tipo de bruxismo./Foto: Archivo
El estrés y la ansiedad que provocan periodos de crisis como el actual llevan a “liberar la tensión acumulada a lo largo del día apretando los dientes durante la noche”, mientras dormimos, de manera inconsciente y especialmente en las mujeres, según un estudio de la Sociedad Española de Cirugía Oral y Maxilofacial (SERCOM). Esto ha traído un aumento de las patologías mandibulares, especialmente casos de bruxismo, que se está viendo también reflejado en las consultas de dentistas en Cuenca.
Desde Unidental, el odontólogo José Antonio Arcos estima que, en los últimos tiempos, el número de casos de bruxismo entre sus pacientes ha crecido hasta un 50%, algo que, a su juicio, bien podría corresponderse con el aumento de los niveles de estrés por la crisis entre la población. “Siempre se ven casos, pero ahora seguro que el doble” comenta.
El odontólogo explica que los síntomas del bruxismo son “variados, por ejemplo los pacientes presentan mucha rigidez a nivel dentario, desgaste e incluso dolores de cabeza, sobre todo por la mañana al levantarse, ya que se suele apretar más por la noche que por el día. El de por la noche es un bruxismo involuntario”.
Desde el Virgen de la Luz, el cirujano maxilofacial Fernando Ortiz añade que “el bruxismo no tiene por qué producir dolor” y “es fácil que se confunda con otros problemas mandibulares que tienen síntomas similares”. De ahí que sea importante acudir al especialista para obtener el diagnóstico y el tratamiento adecuado.
Tipos y diagnóstico
Por su parte, el cirujano maxilofacial del Hospital Virgen de la Luz de Cuenca, Fernando Ortiz, comenta que la proporción de casos que ven los dentistas no se corresponde con la que ellos tienen en consulta, ya que más o menos el número de pacientes con esta patología se mantiene estable en los últimos años, aunque “se trata de una dolencia muy común, generalmente siempre hemos tenido muchos pacientes con bruxismo, sobre todo mujeres”.
Ortiz precisa que hay diferentes causas por las que puede aparecer bruxismo y que una de ellas puede ser la forma en la que una persona asimila y exterioriza la tensión. Sería ahí donde entrarían los casos de bruxismo por estrés desencadenado por la situación de crisis.
En cuanto a la patología mandibular en sí y a sus consecuencias, dependen del tipo de bruxismo que sufra la persona, explica Ortiz. “El bruxismo primario se da cuando no hay causa patológica que lo provoque y el secundario, cuando es consecuencia de algo más. Además, el bruxismo primario puede ser diurno o nocturno” y lo que es más importante “puede ser céntrico, cuando los dientes se aprietan sin movimiento, y excéntrico, cuando rotan”.
Tratarlo de forma adecuada es muy importante para no sufrir un desgaste irreversible de piezas dentales o la pérdida de ellas.
“El paciente debe identificar cuándo aprieta y aflojar”
Prevenir o minimizar los efectos del bruxismo requiere, en un primer momento, un diagnóstico adecuado. A partir de ahí, las recomendaciones dependen del tipo de patología que el paciente padezca.
El cirujano maxilofacial del Virgen de la Luz, Fernando Ortiz, comenta que “si el bruxismo es diurno, se le enseña a identificar cuándo está apretando los dientes para que afloje. Se trata de un tratamiento de autofeedback”.
En el caso del bruxismo nocturno, lo que más se recomienda al paciente es usar una férula dental que evite la tensión en la mandíbula y el desgaste de las piezas que entren en colisión cuando apriete. Ortiz comenta que “se trata de un aparato elaborado en resina rígida similar a una dentadura postiza y coloca la mandíbula en la llama posición céntrica”.
Se trata de una posición teórica en la que “la bisagra del cóndilo de la articulación esté lo más relajada posible para que no presione en exceso ninguna de las paredes de la articulación”. De este modo, el paciente aprende a abrir y cerrar la mandíbula de manera adecuada.
Hacer deporte, beneficioso
Para los casos de bruxismo nocturno, el doctor Ortiz también recomienda hacer un deporte de intensidad media, como correr suavemente, dos o tres horas antes de irse a la cama. El motivo es que la actividad física ayuda a dormir más profundamente, de modo que sea menos probable apretar los dientes durante el sueño. “La gente que sufre bruxismo nocturno suele tener el sueño muy ligero” concreta Ortiz. Remedios para descansar mejor y no sufrir dolor mandibular.
0 comentarios:
Publicar un comentario